Mi pasión por este mundo empezó muy joven, con tan solo 16 años, cuando me matriculé en Caracterización (maquillaje social, cine, TV y teatro). Al acabar, tuve la gran suerte de empezar a maquillar para grandes firmas como Shiseido, Bobby Brown y Armani Cosmetics, tanto en eventos, pasarela, novias, punto de venta, shootings.
Tras 6 años trabajando como maquilladora profesional, tuve la necesidad de involucrarme y conocer más el mundo de la cosmética porque entendí que un buen maquillaje se realza más con una piel bonita y cuidada. Me formé como Esteticista-Terapeuta en la escuela de Terapias Manuales Vipassana, y ahí, además, descubrí los beneficios que el masaje nos aporta. Con cada masaje que hacía veía los efectos inmediatos que reportaban en los clientes y descubrí la que iba a ser mi segunda pasión: el Quiromasaje. Decidida a mejorar mi técnica, me especialicé en la escuela Dr. Ferrándiz, cuna del Quiromasaje en Barcelona.
Así fue como fui ampliando mis conocimientos y los pude llevar a la práctica a lo largo de más de 5 años en los que tuve oportunidad de encargarme de dos centros de estética, uno especializado en aparatología y otro en estética facial.
Fue así como en 2017 decidí fundar Karma, mi propio centro de estética y bienestar en el corazón de Barcelona. Me considero muy afortunada de poder dedicarme a algo que me encanta, y es que el dicho es verdad: ¡Dedícate a lo que te gusta y nunca tendrás que trabajar!
